Colegios virtuales brindan herramientas para educar a niños y niñas que padecen TDAH
Según el Instituto Neurológico de Colombia entre un 5% y un 10% de menores padecen esta condición.
El trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), es uno de los diagnósticos más referenciados dentro de las aulas, se estima que de 40 estudiantes de 2 a 4 de ellos, probablemente cuenten con este diagnóstico.
El World Mental Health Report: transforming mental health for all, afirma que el 8.8% de la población a nivel mundial tiene TDAH, lo que afecta significativamente la cotidianidad de las personas, especialmente la de los niños.
Por ende, algunos colegios están adaptando nuevas estrategias que les permita a sus estudiantes sentirse cómodos, lo cual implica una ruptura de lo tradicional que obliga a los estudiantes a adaptarse a los estándares de las instituciones.
“El TDAH puede tener un impacto significativo en el rendimiento académico de los niños, la falta de atención puede dificultar la capacidad del niño para concentrarse en las tareas escolares. La hiperactividad y la impulsividad también pueden interferir en el estudio, lo que puede llevar a comportamientos disruptivos en el aula. En general, pueden afectar negativamente el autoestima del niño y su motivación por aprender”, comenta Cristina Acosta, psicóloga infantil.
Genuine Digital School, se suma a esta iniciativa y propone un nuevo modelo de educación que aprovecha la tecnología para brindar una experiencia de aprendizaje más atractiva y personalizada. Esto se logra a través de:
- Contenidos multimedia: Vídeos, imágenes y otros recursos interactivos que captan la atención del estudiante.
- Juegos educativos: Permiten aprender de forma divertida y desafiante.
- Adaptación a las necesidades individuales: Los estudiantes pueden avanzar a su propio ritmo y enfocarse en áreas donde necesitan más apoyo.
Esto supone un gran reto para los docentes, debido a la falta de capacitación frente a estos temas, por ende, se están poniendo en marcha nuevas estrategias como la formación de equipos multidisciplinarios que incluyen psicólogos, terapeutas y expertos en tecnología. Además de realizar actividades para fortalecer las habilidades socioemocionales de los estudiantes.
“Es muy importante crear ambientes seguros, en los que los alumnos puedan expresar sus emociones y sentirse respaldados”, concluye el psicólogo Montaña Ramírez.