El Estado y las disidencias de las FARC acuerdan cese temporal al fuego bilateral
En la mañana del 16 de octubre en el municipio de Tibú, se definieron los criterios que permitirán la paz en los territorios, durante los próximos tres meses.
El acuerdo fue firmado por el jefe de la delegación del Gobierno, Camilo González Posso, y el vocero del Estado Mayor Central (EMC), Andrey Avendaño. El acto de firma se llevó a cabo en el municipio de Tibú, en el departamento de Norte de Santander, en presencia de representantes de la comunidad internacional como la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez y algunos civiles.
Este acuerdo es un paso importante para el proceso de paz con las disidencias de las FARC. El cese al fuego permitirá a las partes iniciar las negociaciones de manera formal, con el objetivo de alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto armado en el país. Ante este acontecimiento el representante de la curul de paz, Diógenes Quintero dijo “lo que esperamos es que en esta mesa de negociación exista la suficiente claridad, transparencia, seriedad, firmeza, planeación, que permitan que la gente que habita esta región valide y legitime estos procesos. Entendemos que muchos elementos del encuentro no se van a conocer”.
En el pacto se establecieron algunos puntos como:
- Cese de acto de hostilidad, incluyendo acciones ofensivas, defensivas y reactivas
- Prohibición de ataques a la población civil, los bienes civiles y la infraestructura
- Respeto al derecho internacional humano
Asimismo, se firmarán otros acuerdos relacionados con:
- Componentes internacionales acompañantes y garantes a la mesa de diálogos de paz
- Lineamientos base para la elaboración de la agenda de diálogos y construcción de paz
- Transformaciones territoriales
Además, se establece un mecanismo de verificación y monitoreo, que estará a cargo de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia y el sostenimiento del diálogo con las comunidades del Caquetá, Putumayo, Cauca, Arauca, Huila, Nariño, Guaviare y Sur de Bolívar, para vincular a la población activamente a este proceso.
Finalmente, el Gobierno y las disidencias de las FARC, instalaron una mesa de diálogo de paz con la firma de un cese al fuego bilateral, además del nombramiento de los delegados que intentarán llegar a un acuerdo para poner fin al conflicto armado. Es un escenario complejo pero clave para la construcción de una paz duradera en Colombia.