Jóvenes relatan lo que no se ha contado de su territorio
Con las cámaras al hombro, los morrales llenos de energía, recorriendo las trochas y caminos rurales se narran historias de resiliencia, transformación y paz.
Para John Libaniel, el rechazo y críticas que ha recibido en diversas ocasiones de su vida, inclusive durante su formación profesional por ser oriundo de este municipio del sur del Meta, no ha sido un impedimento para cumplir el sueño de crear un colectivo de comunicaciones.
La idea de este proyecto surgió en el año 2008, sin embargo, por diversos factores económicos y sociales, se aplazó una década. Diez años después, este puertorriqueño encontró una semilla en medio de la llanura, la hizo crecer a través de un proyecto que presentó a un organismo internacional, que entre ajustes, y observaciones, concluyó con la asignación de un proyecto enfocado en la formación en comunicación para 45 niños de las veredas Barranco Colorado, La Rivera y en el casco urbano del municipio, a través del Programa Alianzas para la Reconciliación de Usaid y Acdi Voca.
Durante el siguiente año este proceso permitió que Libaniel sintiera más palpable su propósito, dando vida al Colectivo Juvenil Cámara, Luces, Acción – CLAP, “se conformó la producción como una organización nueva de jóvenes con autonomía administrativa, financiera, jurídica. A partir de ahí empezamos a seguir fortaleciendo el proceso, fueron seis meses que nos dejó una capacidad técnica instalada y unos equipos, pero todavía falta mucho” indicó.
Con las cámaras al hombro, los morrales llenos de energía, recorriendo las trochas y caminos rurales, se fueron uniendo otros tres jóvenes, Juan Esteban Gutiérrez, Esteban Mejía y Jhon Sanabria que se han convertido en el núcleo fundamental de este colectivo.
CLAP Producciones siguió en búsqueda de nuevas opciones para continuar este proceso, es así como se acercaron al programa Territorio de Oportunidad, y lograron conseguir unos fondos con los que crearon la Escuela de Comunicaciones y el Laboratorio de Producción Audiovisual.
Reporteros Comunitarios y la transformación de Puerto Rico
“Lastimosamente Puerto Rico y los municipios del sur del Meta que han mojado prensa nacional ha sido por algo malo, por un bombardeo, un allanamiento a un laboratorio, una toma guerrillera o una incursión paramilitar. Entonces, detrás de nuestro ideal, se busca avanzar en el cambio de imagen y perspectiva del territorio, contar las cosas buenas que están pasando, nuevas historias y narrativas, así surge CLAP Producciones”, relata Jhon Sanabria.
Es así como este colectivo, se vincula a la Red de Reporteros Comunitarios de Colombia, un proceso formativo que potencia las competencias comunicativas a través de formulación de proyectos, creación de historias, radio digital, marketing y creación de contenido, de manera que se convirtieron en los voceros de las historias de transformación de su territorio.
La Red es una iniciativa liderada por la Agencia de Renovación del Territorio – ART- en las zonas priorizadas para la construcción de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial – PDET, y precisamente Puerto Rico hace parte de los 12 municipios PDET que componen la subregión Macarena – Guaviare.
Actualmente, Libaniel es el reportero comunitario que representa al departamento del Meta ante la asamblea de la Red a nivel nacional. “Con CLAP estamos trabajando e incursionando en el PDET de Puerto Rico a través del pilar 8 – Reconciliación, Convivencia y Paz, en el marco de un proyecto de memoria histórica, con la creación de una serie audiovisual. La Red de Reporteros es un estandarte estratégico para la misión que tenemos como colectivo, nos permite ir mucho más allá y romper las fronteras regionales” indicó el reportero.
Juan Esteban Gutiérrez, un joven camarógrafo que hace parte recientemente del colectivo y quien participó del proceso con la Red, afirma que los talleres recibidos fueron de gran aprendizaje “en prensa, escritura, redacción y video, todo fue muy bueno, con este conocimiento y a través del colectivo, muchas personas nos ven como un ejemplo, porque siempre queremos mostrar las cosas buenas que pasan en nuestro municipio, así le aportamos a la paz”.
Lo que no te han contado
Desde hace un año y medio, los jóvenes y estudiantes del colegio municipal que realizan sus prácticas en CLAP, han navegado las orillas del río Ariari y recorrido las llanuras produciendo la serie documental “Lo que no te han contado”. En ese reto audiovisual que han asumido están descubriendo aquellas historias que hacen de Puerto Rico, como indica su himno, una tierra de campesinos luchadores.
El documental se realiza en torno a la memoria y la reconciliación, consolidando relatos y crónicas que determinaron las dinámicas históricas locales respecto a hechos victimizantes. Así mismo, registra cómo los sucesos dolorosos en muchas ocasiones fueron transformados en oportunidades de desarrollo económico y social de los territorios. Para Juan Esteban ha sido una experiencia maravillosa: “He encontrado muchas historias importantes, personas que han vivido situaciones difíciles en su vida debido al conflicto y las han superado, son relatos muy valiosos que nunca nos han contado las generaciones anteriores”.
Para estos jóvenes la producción documental es uno de sus más grandes logros, sueñan con que CLAP sea conocido a nivel nacional, que su serie sea vista en todo el país. “Nosotros como jóvenes debemos seguir avanzando en este proceso, para que nuestra comunidad se enamore de nuestro trabajo y crean en los medios de comunicación locales, en las cosas positivas que suceden en los municipios. Nosotros como CLAP junto con la Red de Reporteros podemos ser el cambio”, expresa Juan.
Los protagonistas de esta historia manifiestan que conocer el contexto histórico que ha vivido el territorio permite que posiblemente no se repita y esperan que esas historias de transformación y construcción sean un ejemplo para las próximas generaciones.
John Libaniel, con su acento recio y la intensidad en sus palabras, concluye con orgullo que se siente muy feliz de ver cómo va el proceso: “Me llena de emoción saber que seis personas están vinculadas y se benefician de este sueño, me satisface profundamente saber que mis alumnos ahora son mis compañeros de trabajo y que sí hay una oportunidad grande a través de las comunicaciones”.